La villa de Sahagún, en el sureste de León, constituye un punto turístico de gran interés como núcleo pionero del arte mudéjar
Sahagún o Sahagún de Campos es una villa y municipio leonés, situado en la parte suroriental de la provincia, dentro de la comarca de Tierra de Campos.
Punto de paso destacado dentro del Camino de Santiago, Sahagún cuenta con una gran historia a sus espaldas y con un patrimonio de incalculable valor.
Dentro de este patrimonio, hay que destacar que Sahagún es uno de los focos más destacados del arte mudéjar en España, de hecho existen indicios de que el arte románico-mudéjar probablemente se iniciara aquí.
Pero antes de recorrer esta hermosa villa leonesa… ¿que entendemos por arte mudéjar?
Pues el arte mudéjar es un estilo artístico que tiene lugar de forma exclusiva en la península ibérica entre los siglos XII y XVI como consecuencia de la confluencia de corrientes artísticas cristianas y musulmanas durante ese periodo.
Y como indicábamos, Sahagún es cuna del arte mudéjar, surgiendo en esta localidad las primeras representaciones del mudéjar en España en el siglo XII, a la par que en la villa segoviana de Cuéllar.
Hecho este pequeño inciso, vamos ya a recorrer Sahagún y todo lo que puede ofrecernos:
Monasterios
Monasterios y conventos constituyen en nuestro país un rico patrimonio histórico, artístico y cultural.
La provincia de León nos ofrece una buena muestra de ellos y dentro de esta, la villa de Sahagún constituye un punto neurálgico destacado.
Monasterio Real de San Benito
La historia Sahagún está unida de forma irremediable a la del monasterio de San Benito.
De origen incierto, vivió su máximo esplendor en el siglo XII, cuando formaba parte de la Abadía Cluniacense que había en Sahagún y en torno a la cual se fundó la propia población, llegando incluso a acuñar moneda.
Declarado Monumento Nacional en el año 1931, en la actualidad sólo se conservan intactos 3 de sus elementos:
- Arco de San Benito: Portada que data del siglo XVII
- Capilla de San Mancio: También del siglo XII y donde podemos ver uno de los primeros muros de estilo mudéjar de la península ibérica.
- Torre del Reloj: construida en sillería por el padre benedictino Miguel Echano en el siglo XIX.
Monasterio de Santa Cruz
El monasterio de Santa Cruz o convento de las benedictinas de la Santa Cruz tiene su origen en la homónima iglesia de Santa Cruz del siglo XI.
La construcción actual data del siglo XVI, aunque sufrió diversas modificaciones y reformas, especialmente a lo largo del siglo XIX.
El edificio del monasterio está realizado en ladrillo y hierro y destaca por su sobriedad, que contrasta con las piezas de gran valor que encontramos en el interior.
Destaca por ejemplo el retablo de estilo barroco, obra de José Benito de Churriguera o los sepulcros realizados en mármol y madera que contienen los restos del rey Alfonso VI y sus cuatro esposas.
También cuenta con un museo donde podemos ver una custodia procesional de plata del siglo XVI, diversas esculturas de los siglos XVI y del XVII, así como diversas pinturas y bordados.
Iglesias
Y si patrimonio histórico y artístico son los monasterios, no lo son menos las iglesias, auténticas joyas por descubrir en muchos casos.
Las iglesias más importantes de Sahagún fueron construidas entre los siglos XII y XVI, con una importante presencia del ya nombrado arte románico-mudéjar en ellas.
Iglesia de San Tirso
La iglesia de San Tirso constituye una de las primeras iglesias del arte románico-mudéjar de España.
Comenzó a construirse a comienzos del siglo XII en sillería siguiendo el estilo románico y sería finalizada en ladrillo (los ábsides laterales son totalmente de ladrillo).
La iglesia cuenta con planta basilical, tres naves y tres ábsides de forma semicircular y destaca en ella especialmente su alta torre que se eleva sobre el crucero.
Aunque actualmente no está abierta al culto, si que cuenta con un museo de arte sacro, donde entre otras, podemos ver una exposición permanente con 6 maquetas representativas de los edificios más emblemáticos de la villa.
Iglesia de San Lorenzo
También representativa del arte mudéjar es la iglesia de San Lorenzo, construida en el siglo XIII.
Está construida en su totalidad en ladrillo y destaca en ella la cabecera con tres ábsides de arquerías de herradura y la gran torre de 4 pisos, con series de 4 ventanas.
Del interior es reseñable la pila de agua bendita realizada con dos capiteles y un cimacio mozárabes del siglo X del antiguo monasterio benedictino de Sahagún, así como el retablo barroco del siglo XVIII.
Iglesia de San Juan
Esta iglesia de estilo neoclásico colonial fue construida en el siglo XVII en honor a San Juan de Sahagún, patrón de la localidad.
Y es que cuenta la tradición que se construyó sobre el mismo lugar donde nació San Juan de Sahagún en el año 1430 y concretamente se dice que el altar central del templo se sitúa sobre la alcoba en la que vino al mundo el Santo.
La iglesia consta de una sola nave y crucero, con cinco altares y de su interior destaca el retablo de estilo neoclásico que acoge la urna con los restos de los Santos Mártires Facundo y Primitivo.
Iglesia de la Trinidad
También de estilo neoclásico es la iglesia de la Trinidad, construida en su totalidad con ladrillo entre los siglos XVI y XVII, si bien la torre es previa, del siglo XII.
En esta iglesia fue bautizado San Juan de Sahagún y una vez fallecido, llegó a albergar reliquias durante bastantes años.
El templo está cerrado al culto desde el año 1964 y actualmente cumple diversas funciones:
- Albergue de peregrinos con capacidad para 64 personas
- Oficina de Turismo de Sahagún
- Auditorio Municipal Carmelo Gómez en honor al famoso actor nacido en la villa.
Santuario de la Peregrina
Y finalmente, dentro de las iglesias más destacadas que tenemos en Sahagún, nos trasladamos a las afueras de la localidad, donde sobre una colina tenemos el santuario de la Peregrina.
Se trata de un templo franciscano del año 1254, reconvertido en iglesia (su última reforma data del año 2011) y que ha sido catalogado como Monumento Nacional y Bien de Interés Cultural.
Su nombre viene al ser punto de paso de los peregrinos en su camino hacia Santiago de Compostela.
A pesar de las reconstrucciones y restauraciones sufridas aún se puede apreciar claramente su estructura mudéjar.
Del interior destacan las yeserías moriscas de la sacristía o el retablo de la capilla mayor del siglo XVI.
Otras cosas que ver en Sahagún
Pero aparte de visitar estos monumentos imprescindibles, en tu visita a Sahagún también también hay otras cosas que deberías ver y hacer.
Por ejemplo, no debes dejar de dar un paseo por su plaza mayor, donde se encuentra el edificio del ayuntamiento y en cuyos soportales está repleta de pequeños negocios locales, bares y restaurantes.
También paseando por sus calles podremos encontrar algunas casas construidas con el estilo tradicional denominado a ¨poste y carrera¨ que presentan entramados de madera en diferentes direcciones y cuyos espacios se rellenan con ladrillos o adobes.
Puede que también te encuentres en tu recorrido por la ciudad con el Puente Canto, un llamativo puente sobre el río Cea, que aunque fue construido en el siglo XVIII es de origen romano y que nos recuerda que forma parte del camino de Santiago por el cruceiro que preside uno de sus lados.
Gastronomía de Sahagún
Y como no todo va a ser pasear y visitar monumentos, no puedes irte de Sahagún sin disfrutar de su excelente gastronomía.
El puerro de Sahagún es, sin duda, su producto estrella, introducido en la villa por los mojes de Cluny y cultivo preponderante en la actualidad.
También destacan en su gastronomía las legumbres, carnes de caza, caracoles y cangrejos, la cecina y por supuesto los embutidos de la matanza.
Todo ello, bien regado con un buen vino de la D.O. León, que no puede faltar en tu mesa.
Y para endulzarte son dulces típicos de Sahagún los amarguillos, las galletas de hierro o los canutillos de crema de las monjas de San Pedro de las Dueña.
Esperamos que os haya gustado este post y si aún no conocéis Sahagún os haya animado a hacerlo.
Siempre es bueno acercarse a la provincia de León y descubrir todo lo bueno que puede ofrecernos.
Es mi pueblo y portanto el más bonito de ESPAÑA
Ya que se comenta los canutillos de crema de las monjas de San Pedro de las Dueñas no había estado mal, hablar de su Iglesia, su Monasterio y el Cristo de Gregorio Fernández. Gracias por acordarte de un pequeño pueblo, repleto de grandes obras.